El venezolano Francisco D’ Agostino, sancionado el pasado mes de enero por la unidad de inteligencia financiera del Departamento del Tesoro de los EE.UU. por rol como contratistas de la empresa estatal Petróleos de Venezuela al facilitar transacciones que daban oxígeno financiero al régimen chavista evadiendo las sanciones impuestas por EE.UU. a Venezuela, adquirió junto a su esposa una lujosa casa valorada en más de 7 millones de euros en Mallorca, España.
El domicilio lleva por nombre ‘Son Galceran’, una de las casas más míticas situada entre Valldemossa y Deià, ha sido vendida tras diez años en el mercado inmobiliario. La propiedad, dividida por la carretera que cruza la Serra de Tramuntana, consta de dos edificaciones, una torre de vigía sobre las rocas y frente al mar, convertida en casa con piscina, y la casa principal, construida en tiempos del archiduque Lluís Salvador, que fue su propietario y alojó en ella a la emperatriz Sissi en una de sus frecuentes y desconocidas visitas a Mallorca.
La propiedad pasó a manos de la familia de Bartolomé March y Maritín Cencillo en el siglo XX, pero fue el primogénito de la familia quien la convirtió en mítica a finales de los años setenta y ochenta, cuando comenzó a organizar veladas culturales y divertidas fiestas que atraían a la alta sociedad del mundo entero. La lista de personalidades que se han alojado o han visitado la propiedad en alguna ocasión sería interminable.
Los nuevos habitantes de Son Galceran no son personas desconocidas, pues se trata del empresario venezolano Francisco Javier d’Agostino, casado con la hermana de Margarita Vargas, esposa de Luis Alfonso de Borbón. Victoria Vargas vivía en Nueva York junto a su marido Francico Javier y sus hijos hasta que la justicia de EEUU lo puso en una situación complicada. Fue acusado, junto a otros dos empresarios venezolanos, de servir de pantalla para burlar el régimen de sanciones de EEUU y lograr comercializar el crudo venezolano en todo el mundo. En este escenario, la pareja ha elegido Mallorca para vivir y seguir un perfil bajo socialmente hablando, aunque mantiene abiertas sus casas de Nueva York y Caracas.
En Venezuela se ha relacionado a Francico Javier d’Agostino con el Gobierno de Chávez, primero, y con el de Maduro después. Una conexión que el magnate y su familia siempre han negado. Lo que si sabemos es que D’Agostino ya era amigo de Luis Alfonso de Borbón, que fue invitado a su boda con Victoria Vargas y fue allí donde conoció a la que hoy es su esposa. D’Agostino, de 46 años, forma parte del grupo conocido como los ‘bolichicos’, hijos de las grandes familias acaudaladas de Venezuela.
EE.UU sancionó a D’Agostino
El 19 de enero de 2021 la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) del Departamento del Tesoro de los Estados Unidos designó a tres personas, catorce entidades y seis embarcaciones por sus vínculos con una red que intentaba evadir las sanciones de Estados Unidos al sector petrolero de Venezuela. La acción, tomada de conformidad con la Orden Ejecutiva 13850, según enmendada, se basó en las designaciones de la OFAC del 18 de junio de 2020 dirigidas a Libre Abordo, SA de CV (Libre Abordo) y una red más amplia con sede en México involucrada en la venta ilícita de petróleo venezolano. La acción se dirigió a orquestadores y facilitadores adicionales con vínculos con la red de México que han conspirado con el ministro de petróleo de Maduro.
“Aquellos que facilitan los intentos del régimen ilegítimo de Maduro de eludir las sanciones de Estados Unidos contribuyen a la corrupción que consume a Venezuela”, dijo el secretario Steven T. Mnuchin. “Estados Unidos sigue comprometido con apuntar a quienes permitan el abuso de los recursos naturales de Venezuela por parte del régimen de Maduro”.
Los principales actores designados el 19 de enero de 2021 incluyeron a Alessandro Bazzoni (Bazzoni), Francisco Javier D’Agostino Casado (D’Agostino), Philipp Paul Vartan Apikian (Apikian), Elemento Ltd (Elemento) y Swissoil Trading SA (Swissoil).
¿Qué más se sabe de Son Galceran?
Manuel March Cencillo, nieto del financiero Juan March, había puesto a la venta la emblemática finca de Son Galceran, ubicada en Valldemossa, que fue propiedad en su día del archiduque Luis Salvador de Austria.
Según un reporte en 2019 de Juan Luis Ruiz Collado para UltimaHora.es, la inmobiliaria alemana Engel & Völkers fue la que recibió el encargo para comercializarla a nivel internacional. Está en venta por 7,5 millones de euros y la propiedad cuenta con 1.000 metros cuadrados interiores, que incluyen siete habitaciones con baño, numerosas salas de estar, un amplio comedor, biblioteca privada, un cine en casa y un gimnasio. El terreno abarca unas 70 hectáreas en total, con jardines bellamente diseñados, por donde paseaba la emperatriz Sissí cuando visitaba a su primo en sus viajes a Mallorca.
La finca de Son Galceran siempre ha estado relacionada con el mundo de la cultura, pero tras ser adquirida por la familia March Cencillo se implementó aún más esta faceta. Juan March Cencillo, hermano de Manuel y que falleció en 1992, fue su propietario y el promotor de encuentros literarios y musicales cada verano en sus jardines, en el que participaban personalidades ilustres del mundo de la cultura, política, cine y empresarios y banqueros de moda. Algunos veranos asistieron, entre otros, Michael Douglas, Catherine Zeta Jones y Richard Branson.
Construida en el siglo XVII, en ella vivió de forma permanente el administrador del Arxiduc Lluís Salvador. Manuel March heredó la finca de su hermano Juan a su muerte.
No es la única operación que la promotora alemana comercializa en la Isla de estas características, para lo cual ha desarrollado una estrategia promocional ligando las fincas con Hollywood.
«Los vínculos de Baleares con personaje históricos y estrellas de Hollywood convierte a estas Islas en un destino único solicitado internacionalmente, tanto para primera como para segunda residencia», señaló el director general de la promotora germana, Florian Hofer.
