El actual sistema parlamentario en Francia es bicameral y está conformado por el Senado (Cámara Alta) y la Asamblea Nacional (Cámara Baja).
El escrutinio legislativo francés es uninominal mayoritario, esto significa que el candidato que obtiene el mayor número de votos gana con exclusión de todos los demás. El número de candidatos en esta contienda es de 6.293, es decir, en promedio una decena de candidatos por cada circunscripción -en total son 577 circunscripciones, el mismo número de escaños-.
Una reducción en participantes comparado con las elecciones de hace 5 años, cuando hubo cerca de 7.900 candidatos.
Estas elecciones se hacen bajo un sistema muy criticado, porque beneficia a los grandes partidos, aunque por ahora no hay voluntad política de cambiarlo. El partido Agrupación Nacional de Marine Le Pen y otros partidos más pequeños llevan décadas clamando por la instauración de un sistema proporcional o al menos mixto.
¿Cómo se vota para renovar la Asamblea de Francia?
Como en las presidenciales, los franceses elegirán a los miembros de la Asamblea Nacional mediante sufragio universal directo, en dos rondas. El país se divide en 577 circunscripciones electorales, divisiones territoriales en las que se eligen los diputados de la cámara baja del Parlamento galo, actualmente Asamblea Nacional.
Cada departamento de Francia contiene, al menos, una circunscripción y sólo un candidato puede llegar a ser diputado de esa circunscripción: el que obtenga la mayoría de los votos.
¿Quiénes ganan un escaño desde la primera vuelta?
Ganarán en primera vuelta aquellos que obtengan más del 50% de los votos emitidos y que representen, al menos, el 25% del voto del electorado. Ellos dejarán garantizado su escaño en la Asamblea. Esto significa que la tasa de abstención es y será determinante.
¿Quiénes pasan a la segunda vuelta de las legislativas?
Todos los candidatos que superen el umbral del 12,5% de los votos este 12 de junio pasarán a la segunda vuelta del 19 de junio, donde ganará el candidato con más votos. En caso de empate -en una circunscripción- entre dos candidatos, vencerá el de mayor edad.
También puede presentarse que haya tres candidatos -en una circunscripción- en la segunda vuelta, a esto se le conoce como “triangular” o cuatro candidatos, conocido como “cuadrangular”, pero ganará el más votado sin importar el número de sufragios.
En los últimos comicios, de 2017, el partido de Macron y sus aliados obtuvieron una abrumadora mayoría absoluta de 351 escaños, frente a los 136 de Los Republicanos, 45 del Partido Socialista, 17 de La Francia Insumisa y 8 del ultraderechista Reagrupación Nacional.
¿Cuál es la duración del mandato de un diputado?
La duración del mandato de un diputado es de cinco años, salvo que la legislatura se interrumpa por una disolución de la Asamblea Nacional (artículo 12 de la Constitución) y se organicen nuevas elecciones. El mandato es renovable sin límites, esto quiere decir que un diputado saliente puede, por tanto, volver a presentarse y seguir siendo reelegido.
¿Cuáles son las fechas de las votaciones en los territorios de ultramar?
-En la Polinesia Francesa, el 4 y 18 de junio de 2022.
-En la zona América y Caribe, el 4 y 18 de junio de 2022.
-En el resto del mundo, el 5 y 19 de junio de 2022.
-En Guadalupe, Guyana Francesa, Martinica, San Bartolomé, San Martín, San Pedro y -Miquelón, los días 11 y 18 de junio de 2022.
-Y en Francia metropolitana, los domingos 12 y 19 de junio de 2022.
¿Qué es la cohabitación política y cuándo aparece?
Se habla de cohabitación cuando el presidente de la República no está en el mismo bando político que su primer ministro. Esta situación puede surgir después de las elecciones legislativas, cuando el hemiciclo está dominado por una tendencia política diferente del partido presidencial.
En Francia esta coyuntura se produjo en tres ocasiones durante la V República. Dos veces bajo la presidencia de François Mitterrand (socialista) y luego con Jacques Chirac (conservador).
En este caso, el presidente debe nombrar un primer ministro de la nueva mayoría parlamentaria. El jefe de Estado y el jefe de Gobierno deben entonces “coexistir” para dirigir la Nación.
Esta situación es desfavorable para el presidente de la República, que pierde su poder sobre las decisiones internas del país. Los asuntos internos corresponden al primer ministro y a su mayoría en la Asamblea, facultada para aprobar leyes. El presidente debe compartir sus prerrogativas con su primer ministro. Además, el jefe de Estado no puede obligar a su primer ministro a dimitir, pero puede disolver la Asamblea Nacional mediante la organización de un nuevo escrutinio.
La clave en la elección de este año reside, según los analistas, en si la unión de la nueva plataforma de izquierdas llamada Nupes -Nueva Unión Popular, Ecológica y Social- puede poner en peligro la mayoría absoluta del partido de Gobierno, que entonces tendría que recurrir a los conservadores para poder aprobar nuevas leyes en la Asamblea Nacional.