El jefe de Tesla, Elon Musk, informó el viernes a Twitter que reincide el acuerdo de compra venta pre establecido que tenía un valor de 41 mil millones de dólares.
Para Jason Miller, ex asesor de Donald Trump y director ejecutivo (CEO) de la plataforma Gettr, esto no significó una sorpresa.
En efecto, el fundador de Gettr Trump, lo comentó en el pasado mes de marzo a nuestra jefa editora del TFP, Laura De Rosa, indicando que a su criterio, el acuerdo estaba condenado al fracaso desde el principio.
“Los números simplemente no funcionan, a Elon Musk ofrece 54 dólares por acción. Actualmente se ha reducido a 37 dólares por acción, que es una caída masiva“, precisó.
Dl mismo modo, el jueves pasado ( 1 día antes del anuncio de Musk), The Washington Post publicó también que el acuerdo estaba en grave peligro en tanto Musk creía que no se podían verificar los datos de las cuentas de usuario falsas.
Por su parte, el servicio de mensajes cortos del pajarito azul, quiere contraatacar y entrar en una batalla legal demandando al hombre más rico del mundo.
Miller quien además ha sido comentarista de CNN ha dicho que la implosión de esta acuerdo estaba prevista desde hace mucho tiempo” y que Musk ha expuesto la “cultura políticamente discriminatoria” de Twitter.
Empleados de Twitter se refieren con orgullo a sí mismos como comunistas en videos
Miller también ha hablado en otras oportunidades sobre el sabotaje de los empleados de Twitter que durante algún tiempo estuvieron tratando de evitar la adquisición por parte Musk, desde el momento en que dicha posibilidad se hizo pública.
“No olvidemos el pánico de los empleados de Twitter ante una posible adquisición de Musk, que fue tan grave que la empresa tuvo que implementar medidas de seguridad para evitar que los ingenieros sabotearan la plataforma. O los videos filtrados de empleados de Twitter burlándose personalmente de Musk y otros empleados exclamando alegremente: “Somos malditos comunistas”.
Otros empleados de Twitter también atacaron personalmente a Musk por ser “un extremista ideológico” que alentaría la desinformación.
“¿El supuesto pecado de Musk? Prometió restaurar derechos adicionales de libertad de expresión en la plataforma. Estas no son las acciones de una empresa preocupada por la libertad de expresión. La realidad es que la cultura de Twitter está rota y no se puede arreglar”.
El expresidente Donald Trump comentó sobre la toma de posesión fallida de una manera mucho menos diplomática el domingo.
Musk es un “maldito mentiroso” que nunca estuvo dispuesto a pagar el “precio ridículamente alto de $ 44 mil millones por Twitter, de todos modos.
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