Comerciantes en Ciudad Guayana temen que el cierre de sus negocios sea la única vía ante las tarifas de Fospuca por el servicio de recolección de basura. Pese a los encuentros entre las partes, no hay todavía acuerdo en común.
Puerto Ordaz. “Aseo urbano sí, tarifas excesivas no”. Con este premisa, ciudadanos y comerciantes de Ciudad Guayana rechazaron las tarifas de Fospuca por concepto de recolección de basura en el municipio Caroní, estado Bolívar.
Si bien en algunas sectores se percibió un cambio positivo con respecto a la recolección de desechos sólidos, tanto en zonas residenciales como comerciales, la queja se centra en las tarifas de Fospuca y cómo se establecieron.
Una feria de hortalizas y supermercado de la ciudad debe pagar 1700 dólares, según la facturación de diciembre de 2022. Una rectificadora del sector Unare recibió dos facturas, una por 5000 bolívares y otra por 8000 bolívares.
Los reclamos hechos ante la oficina de Fospuca no han tenido mayor éxito para los afectados. Ismat Naser, desde hace 17 años, trabaja en el área de alojamiento con una pequeña posada. Cuando introdujo el reclamo, la facturación era de 5000 bolívares. Ahora adeuda casi 24.000 bolívares, alrededor de 1300 dólares a tasa del Banco Central de Venezuela.
Si tuviese ocupación, todavía; el detalle está en que la semana pasada no tuve clientes y esta semana, uno solo para una habitación de 25 dólares. ¿Qué va a alcanzar para pagar personal, impuestos y todas estas cosas? Tendré que cerrar, porque no se puede pagar”, afirma Naser.
En el caso de Marielena Salazar, propietaria de un balneario en Villa Bahía, además de la tarifa de Fospuca, su problema es que la empresa no ha prestado el servicio en la zona desde que comenzaron operaciones en Caroní, como ocurre en otras comunidades de Ciudad Guayana.
En las zonas residenciales tampoco están muy conformes con los cobros. Esto debido a que se genera una facturación a través del pago a Corpoelec, que corresponde a la administración del “relleno sanitario” sin culminar. Esta competencia correspondía a la Gobernación de Bolívar, pero desde julio de 2022 le dio la contratación a Fospuca.
Yo pago por el condominio y pago por Corpoelec, eso no puede ser. El recibo me salió como en 160 bolívares. Yo soy un pensionado. ¿Qué ingreso tengo yo para afrontar todo ese cargo que nos están haciendo?”, expuso Ramón Ascanio.
El concejal José Ríos alertó que las tarifas que estableció el alcalde no fueron aprobadas en Cámara Municipal.
“Es un decreto tarifario que dio el alcalde Tito Oviedo, pero que no lo ha consagrado en la Cámara para que salga como ordenanza. No pueden solucionar un problema de la basura aniquilando al sector comercial de la ciudad, porque es inviable e insostenible”, sostuvo el funcionario.
A esto se suma la limitante que aplica la Alcaldía a los empresarios a la hora de declarar sus ingresos brutos. Si no están solventes con Fospuca, la página web les impide continuar con el proceso, cuya fecha tope para la declaración es hasta el 20 de enero.
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