Ha pasado casi un año de mi primer artículo sobre la Guerra en Ucrania, pero he seguido cada día cada evento acontecido en esta Guerra. Y esos eventos me muestran con claridad como el pensamiento postmodernista está imperando en occidente en la toma de decisiones a través de la irracionalidad y el sentimentalismo.
Con mucha atención contemplé toda la sesión del Parlamento Británico del día 11 de mayo 2023 en la cual el Secretario de Defensa de Gran Bretaña, Ben Wallace hizo una declaración al Parlamento para actualizar a los miembros sobre el programa continuo de ayuda militar del Reino Unido a Ucrania. La mayor parte de la sesión de una hora la dedicó el Secretario Wallace a enumerar con dramatismo cada blanco ucraniano que ha atacado Rusia para finalmente justificar y confirmar que el Reino Unido ha donado misiles Storm Shadow a Ucrania. Storm Shadow es un misil de precisión de largo alcance que complementa otros sistemas de largo alcance ya dotados a Ucrania, incluidos los misiles HIMARS y Harpoon. Con estos misiles, Ucrania está en capacidad de atacar importantes ciudades rusas. Este nuevo paso en la guerra es extremadamente peligroso ya que anuncia una nueva etapa de mayor activismo por parte de la OTAN en la guerra.
Una etapa en la cual los miembros de la OTAN abiertamente apoyan a Ucrania con su mejor armamento y donde su participación activa en territorio ucraniano puede iniciarse en cualquier momento. Con una ligereza que bordea la irresponsabilidad el gobierno británico arrastra a su país a un conflicto a 3 mil kilómetros de distancia que representa el peligro de transformar a Inglaterra en el primer objetivo nuclear ruso. No hay conciencia del enemigo al que se enfrentan, parece que pensaran que Rusia es algún país africano que invadieron en el siglo 19 y que por ser una isla un conflicto en Europa no los va a afectar. Estamos en un mundo globalizado que se transformo en un pañuelo, un misil hipersónico nuclear ruso que viaja a 10 mil kilómetros por hora tarda 4 minutos en llegar a Londres, a eso nos estamos enfrentando en occidente. No existe otro país en el mundo con esa tecnología. No digo que debemos tener miedo, digo que debemos ser comedidos en los pasos que se den y conocer nuestras capacidades y limitaciones. Durante la guerra fría ningún país de occidente se atrevió jamás a atacar el territorio de la Unión Soviética pero hoy día vemos a una Inglaterra envalentonada retando a Rusia. Esa posición es válida a la luz del principio de auto determinación de los pueblos, pero ¿cuál es el objetivo? ¿Que gana Inglaterra con esta posición? ¿Que gana el pueblo británico? Para mí la respuesta es muy simple, No gana nada, Ucrania no representa un interés vital ni una prioridad para la política exterior de Inglaterra como para arriesgarse a ser destruido por Rusia.
En mi primer articulo sobre la guerra expliqué la motivación rusa para invadir Ucrania. Aclaré, que en ningún momento estaba defendiendo la posición de Rusia, sino simplemente pretendía explicar la raíz y lógica geopolítica y geoestratégica para la decisión y comportamiento de Putin, de ir una guerra contra Ucrania, que no es otra que defender la existencia de Rusia como nación. Ese pensamiento de defensa de su existencia es parte de la psiquis de todo ruso. Basta con ver la historia rusa, Rusia fue invadida por todos los imperios de cada época, fue saqueada, despojada de territorios y siempre el pueblo ruso en armas termino pagando el precio al luchar para seguir existiendo y siguen estando dispuestos a hacerlo. Solo en la segunda guerra mundial murieron 25 millones de soviéticos luchando frente a la Alemania Nazi. Que nos hace suponer que hoy ese mismo pueblo y sus lideres no está dispuesto a hacer lo mismo frente a lo que ellos consideran un peligro existencial.
La estrategia de los miembros de la OTAN de inmiscuirse en la guerra de Ucrania sin exacerbar los ánimos rusos más allá de lo tolerable, fue muy inteligente, se habían organizado para suplir sistemas de armas a Ucrania de tal forma que ninguno sobresaliera por encima del otro y no llamar mucho la atención, solamente Estados Unidos resaltaba por el volumen y la cantidad de equipo suministrado a Ucrania sin embargo hoy pareciera que esa estrategia se acabó y veremos un activismo desbordado.
El último paso en ese activismo por parte de la OTAN es un posible apoyo directo a Ucrania con la elección de blancos y coordinación de ataques desde AWACS. Ya la OTAN informó que desplegaron aviones de alerta temprana y reconocimiento AWACS (Airborne Waring and Control System) en la frontera con Ucrania, estos aviones van a volar a una altitud de unos 9.000 metros y sus radares vigilaran un área de hasta 312.000 kilómetros cuadrados, detectando objetivos que se encuentren en el aire. ¿Cuál es el objetivo? ¿Suplir la incapacidad ucraniana para detectar y destruir aviones y misiles rusos? Si es así, la OTAN buscaría compartir la información recolectada en tiempo real con las fuerzas ucranianas para poder determinar objetivos (misiles, aviones, drones) derribarlos y destruirlos.
Esto para cualquier ser pensante es una participación activa en un conflicto y la justificación para ser un blanco legítimo de ataque por parte de Rusia.
Yo soy un fiel creyente de las soluciones negociadas, buena parte de mi vida como diplomático la dedique a resolver conflictos, y observo que en esta guerra Occidente no tiene la disposición ni el interés de sentarse a conversar y negociar la paz, solo los chinos han realizado un esfuerzo de impulsar conversaciones de paz, las cuales han sido rechazadas y despreciadas principalmente por Estados Unidos. Y yo me pregunto nuevamente, ¿cuál es el objetivo de entorpecer los intentos de paz? ¿Porque la OTAN y Estados Unidos quieren que esta guerra siga adelante? Ciertamente el objetivo es debilitar y destruir a Rusia y así lo han hecho saber algunos funcionarios de la OTAN, cosa que no están logrando.
La gran interrogante es hasta donde están dispuestos a llegar en ese objetivo. Lo que es evidente es que este absurdo objetivo esta poniendo en peligro la vida de todo el mundo. Aunque los medios y los políticos pretendan engañarnos con la idea de que Rusia es solo un país mas del mundo, esto no es cierto, Rusia, aunque no nos guste en occidente es la nación con la mayor capacidad de armas nucleares del mundo. No solo posee 10 veces más armas nucleares tácticas que Estados Unidos 208 vs 1998 ** sino que sus ICBM misiles intercontinentales balísticos cargan 10 ojivas nucleares a diferencia de los norteamericanos que solo cargan una sola ojiva nuclear por misil (LGM-30 Minuteman). Por otro lado, las ojivas rusas son de 800 kt frente a los 350kt de los Estados Unidos. Rusia no es un país cualquiera, es una super potencia nuclear de alcance global.
Mi objetivo con este artículo es resaltar que, si este conflicto escala y se pierde de control, toda la raza humana puede ser destruida. La mitad de todos los muertos en la segunda guerra mundial fueron rusos y todas sus guerras han sido por preservar su existencia como nación, aquí no importa lo que opine yo, lo que opine Biden o Olaf Scholz lo que importa es lo que los rusos piensan de esta guerra. Siendo así, que en el pensamiento ruso lo que está en juego es su existencia como nación los rusos van a llevar esta guerra hasta el final y no dudaran, repito, no dudaran de utilizar armamento nuclear si la OTAN y los Estados Unidos llevan esta guerra a un punto sin retorno.
Ucrania está perdiendo y va a perder la guerra, eso es un hecho innegable y así lo hacen saber los documentos filtrados del Pentágono hace un par de meses, siendo la única manera de intentar ganar la guerra una participación de la OTAN en la misma.
No debemos nosotros ni los dirigentes militares y civiles de la OTAN pasar por alto que esta guerra en Ucrania no tiene comparación en la historia y no es ninguna de las que se vivieron el siglo pasado en el marco de la guerra fría. Esta guerra actual es una guerra caliente de occidente contra Rusia. Una Rusia con una capacidad nuclear superior a la de occidente.
Tal vez muchos se sorprenderán con esa afirmación sobre la capacidad nuclear de Rusia, pero es un hecho real, basta con ver la intervención del senador republicano por Louisiana John Kennedy el 3 de mayo 2023 sobre el estado del arsenal nuclear de los Estados Unidos. En esa intervención el senador Kennedy destacó que los Estados Unidos no ha invertido recursos para mejorar y actualizar su arsenal nuclear en más de 30 años y que los sistemas están obsoletos, todo ello frente a nuevos miembros del club nuclear con sistema actualizados. El asunto es tan grave que hoy día los Estados Unidos no tienen capacidad de construir nuevas armas atómicas solo pueden renovar o reutilizar las existentes. Esto nos pone en una desventaja muy grave frente a Rusia y China. Lo que un día sirvió como elemento disuasorio frente a las demás potencias nucleares puede estar perdiendo vigencia ya que esa intervención del Senador Kennedy la vio todo el mundo.
Mi punto de reflexión es que la prepotencia, la ceguera y la sobre estimación de las capacidades militares de occidente por parte de los lideres norteamericanos y de algunos miembros de la OTAN están poniendo en peligro la supervivencia de la raza humana.
Sorprendido veo que nadie levanta su voz, nadie parece darse cuenta del peligro, tal vez esto responde al hecho que cada día los medios de comunicación nos bombardean con cifras falsas sobre los resultados en la guerra en Ucrania y que ningún medio profundiza ni analiza el posible efecto de cada paso que se está dando en esta guerra. También aleja de la conciencia y sensación de peligro de los seres humanos el que hayan pasado 80 años desde que se utilizó la primera bomba atómica en Hiroshima y Nagasaki y que para nuestras generaciones no hay referente en la vida real sobre la capacidad de destrucciones de las armas nucleares más allá de lo que hemos visto en películas de Hollywood y juegos de video.
Mi conclusión es que el mayor peligro es que la OTAN se vuelve más activa en el conflicto de una forma premeditadamente o no, haga escalar y empujar a un enfrentamiento directo entre la OTAN y Rusia. Llama la atención que casi todos los miembros de la OTAN realizan acelerados preparativos de guerra y están comprando armas y firmando contratos multimillonarios de equipamiento.
Es muy lamentable que por la ambición de poder e influencia y por la resistencia de entender que estamos en un mundo multipolar y que ya finalizó la hegemonía de los Estados Unidos nos empujen a un precipicio en el que no ganará nadie y donde el resultado final será la muerte y la destrucción del mundo conocido. Es insólito que un mundo que pudiera beneficiarse del comercio, que pudiera erradicar la pobreza, que pudiera dar saltos tecnológicos impensables al trabajar de manera cooperativa y conjunta busque optar por la guerra y la destrucción mutua.
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