El puerto de La Restinga, en la isla canaria de El Hierro, recibió este martes el cayuco con más inmigrantes a bordo del que se tiene constancia desde que se abrió la Ruta Canaria de las pateras en 1994: más de 280 personas apelotonadas en filas de ocho a diez ocupantes cada una, sin espacio si quiera para abrir los brazos.
«No recuerdo ningún cayuco de ese tamaño. El máximo de la ruta, que yo recuerde, era de 234 personas»,declaró a EFE el jefe de los equipos que Cruz Roja despliega en los muelles de Canarias con cada llegada de inmigrantes, José Antonio Rodríguez Verona.
La embarcación, de 28 a 30 metros de eslora y cuatro de manga, fue detectada por la Salvamar Adhara cuando se encontraba a un kilómetro escaso de la costa. Es la tercera que llega a El Hierro este martes, pero llevaba más personas que las otras dos juntas, 127 y 91 personas.
Sin recuento oficial disponible todavía porque las asistencias siguen en curso en el muelle, su cifra de ocupantes oscila entre los 280 que anotó Salvamento Marítimo español en una primera aproximación y los 271 que tiene registrados el equipo de Cruz Roja en La Restinga.
El cayuco, pintado de múltiples colores, al uso tradicional de los pescadores de Senegal, transportaba sobre todo hombres jóvenes adultos, pero también una decena de mujeres y dos menores, de acuerdo con los primeros recuentos. Entre los menores, hay un niño pequeño.
La Agencia EFE vio un vídeo tomado desde el mismo borde del muelle donde se procedía al desembarco, que muestra el grado de hacinamiento a bordo: filas de ocho a diez personas apelotonadas en cuatro metros de anchura y gente sentaba en proa con los pies por fuera de la borda, sin posibilidad casi de cambiar de posición durante toda la travesía.
El presidente canario, Fernando Clavijo, denunció hoy la «desidia» con la que, a su juicio, aborda el Estado el repunte de la llegada de pateras a las islas y demandó que se «empiecen a ofrecer soluciones» para ayudar al archipiélago frente a esta situación.
«Este repunte viene a confirmar lo que habíamos dicho que ocurriría», refirió.
La llamada Ruta Canaria de las pateras la abrieron dos saharauis que llegaron en una pequeña barca de madera a Fuerteventura el 28 de agosto de 1994.
Desde entonces, cerca de 180.000 personas utilizaron esta ruta para llegar a las islas desde la costa de África, en trayectos que van desde los 100 kilómetros que separan las islas de Lanzarote o Fuerteventura del sur de Marruecos o el norte del Sahara, hasta los 1.000 o 1.200 kilómetros que recorren los cayucos de Senegal.
Los cayucos aparecieron en escena en 2005, para convertirse en protagonistas de la ruta al año siguiente. Entonces, se marcó el máximo de llegadas a Canarias en un año, con 31.678 personas (el doble de las registradas en lo que va de 2023).
A aquella época, que se conoció como «la crisis de los cayucos», se remontan los registros de embarcaciones con más de 200 personas a bordo, como la que llegó al sur de Tenerife el 30 de septiembre de 2008, con 229 ocupantes, que está entre los mayores de la ruta.
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