Con más de 500 ataques precisos, Israel destruye el 70% del sistema de defensa aérea sirio, arsenales estratégicos y capacidades de guerra electrónica en respuesta a la amenaza creciente del terrorismo que tomó el poder en Siria, tras la caída de Bashar Al Assad.
Israel – Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) han intensificado su operación Flecha de Basán, una ofensiva emergente diseñada para desmantelar las capacidades militares del ejército de Bashar Al Assad en Siria y prevenir el uso de estos por parte de grupos terroristas tras la caída del régimen.
Entre los principales objetivos alcanzados, las FDI han destruido sistemas de guerra electrónica, antenas y sistemas de comunicación esenciales para la coordinación militar del régimen.
Además, se ha neutralizado cerca del 70% del sistema de defensa aérea sirio, junto con el 80% de los sistemas de fuego, incluyendo misiles, cohetes y vehículos aéreos no tripulados (UAV).
Los ataques han tenido un impacto significativo en las capacidades estratégicas del régimen sirio. Decenas de aviones de combate, helicópteros artillados y buques de la marina fueron eliminados en lo que Israel considera una acción crucial para contener la amenaza creciente del terrorismo en la región.
En un golpe devastador, las FDI también atacaron depósitos de misiles, radares y un centro de investigación científica clave con objetivos militares en la región de Tartús.
Uno de estos ataques resultó en una explosión de gran magnitud, que, según informes locales, provocó un terremoto de 3,0 en la escala de Richter debido a la detonación de municiones estratégicas. Los incendios y explosiones derivadas continuaron hasta la mañana siguiente.
Desde el inicio de la operación, Flecha de Basán ha registrado al menos 500 ataques, alcanzando 109 baterías tierra-aire (TAKA), 34 sitios de radar y 390 depósitos de misiles, cohetes y UAV. Según el portavoz de las FDI, la operación ha logrado “debilitar las capacidades militares del régimen sirio de manera irreversible, eliminando un peligro directo para la estabilidad de la región”.
El avance de la operación demuestra la precisión y la eficacia de las fuerzas israelíes frente a la creciente inestabilidad en Oriente Medio.
“La operación Flecha de Basán demuestra el compromiso de las FDI por neutralizar amenazas antes de que estas comprometan la seguridad de Israel y de la región. Mientras los regímenes y grupos terroristas intentan aprovechar el vacío de poder en Siria, Israel reafirma su posición como un bastión de estabilidad y fuerza frente al extremismo,” afirmó el portavoz de las FDI.
Con esta operación, Israel envía un mensaje claro: no permitirá que las fuerzas del terrorismo utilicen Siria como base para desestabilizar la región.
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