El Pentágono confirmó este jueves que dos aviones militares de Venezuela realizaron un sobrevuelo provocador sobre el destructor USS Jason Dunham, desplegado en el sur del mar Caribe como parte de la ofensiva del presidente Donald Trump contra los carteles de la droga que operan en la región.
“Hoy, dos aviones militares del régimen de Maduro volaron cerca de un buque de la Armada de Estados Unidos en aguas internacionales. Este movimiento altamente provocativo fue diseñado para interferir con nuestras operaciones contra el narcoterror”, advirtió el Departamento de Defensa en un comunicado, recordando que Venezuela es señalada como base del Cartel de los Soles, estructura criminal encabezada por Nicolás Maduro.
La cadena CBS reportó que se trataba de aviones F-16 enviados por Caracas en lo que funcionarios del Departamento de Estado calificaron como una “demostración de fuerza”. Aunque no se conoció la respuesta inmediata del USS Jason Dunham, Washington emitió una advertencia clara al régimen chavista para que no intente obstruir las operaciones militares estadounidenses.
Contexto de máxima tensión
Este incidente ocurre apenas dos días después de que fuerzas estadounidenses destruyeran en aguas internacionales una lancha rápida que, según el gobierno de Trump, transportaba droga desde Venezuela. El ataque dejó once presuntos integrantes del grupo criminal venezolano Tren de Aragua muertos en acción.
“Que esto sirva de aviso a cualquiera que piense en traer drogas a Estados Unidos: ¡CUIDADO!”, escribió Trump en su red Truth Social, acompañado de un video en el que se observa la embarcación segundos antes de ser alcanzada por fuego letal.
El secretario de Estado, Marco Rubio, también confirmó la operación, subrayando que el blanco era una organización “designada como narcoterrorista”.
Maduro en alerta y bajo presión
Tras los hechos, Nicolás Maduro declaró un estado de “máxima alerta” alegando supuestas amenazas de invasión por parte de EE. UU., aunque la Casa Blanca ha reiterado que no busca intervenir militarmente en Venezuela, sino frenar el narcotráfico que emana del régimen.
Estados Unidos acusó formalmente a Maduro de narcoterrorismo en 2020 y este año incrementó a 50 millones de dólares la recompensa por información que conduzca a su captura.
El despliegue naval y la respuesta de Caracas refuerzan la confrontación entre la administración Trump y el chavismo, que cada vez queda más expuesto ante la comunidad internacional como un régimen criminal.
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