El ministro israelí de Exteriores, Eli Cohen, cancela unilateralmente su reunión con el secretario general de la ONU, António Guterres, y pide su dimisión por las palabras que Guterres utilizó hoy en el Consejo de Seguridad, en el que dijo que “los ataques de Hamás no vienen de la nada”. Ha tomado esta decisión después de que el embajador de Israel ante la ONU, Gilad Erdan, pidiese asimismo la dimisión de Guterres.
Según Erdan, de esa forma Guterres “muestra su comprensión con las campañas de matanzas masivas de niños, mujeres y ancianos” y, por lo tanto, “no es apto para dirigir la ONU”.
“Llamo a su inmediata dimisión”, ha escrito en X (antes Twitter), agregando que las declaraciones de Guterres “son prueba más allá de toda duda de que el secretario general está totalmente desconectado de la realidad en nuestra región”.
Guterres ha afirmado hoy ante el Consejo de Seguridad de la ONU que los ataques de Hamás del día 7 “no vienen de la nada: el pueblo palestino lleva 56 años sufriendo una ocupación asfixiante; sus tierras poco a poco [han sido] devoradas por los asentamientos”.
Sin embargo, ha asegurado que “las quejas de los palestinos no pueden justificar los ataques horribles de Hamas, como esos ataques no pueden justificar el castigo colectivo al pueblo palestino”.
EFE
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