Opinión | ¿Fascista yo? – Por Aldo de Vivo

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Es muy común que el termino fascista sea utilizado como insulto por parte de los socialistas (izquierda) hacia los liberales (derecha), sin embargo y como todo lo que hacen, estos insultos no tienen el más mínimo sentido y sustento en la realidad.

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Lo primero que hay que indicar es que el Fascismo fue popularizado y usado por el dictador italiano Benito Mussolini, pero ¿Qué sostiene la “Doctrina Fascista” de Benito?, entre algunas de sus premisas tenemos:

“El fascismo se opone definitiva y absolutamente a las doctrinas del liberalismo, tanto en la esfera política como en la económica”.

“El Estado fascista reclama gobernar el campo económico no menos que los otros; hace recaer su acción a través de lo largo y ancho del país por los medios de sus instituciones corporativas, sociales y educativas, y todas las fuerzas políticas, económicas y espirituales de la nación, organizadas en sus respectivas asociaciones, circulan dentro del Estado”.

“El concepto fascista del Estado lo abarca todo; fuera de él no pueden existir valores humanos o espirituales, mucho menos tener valor. Así entendido, el fascismo es totalitario, y el Estado fascista -una síntesis y una unidad inclusiva de todo valor- interpreta, desarrolla y potencia la vida entera de un pueblo”.

Las anteriores premisas se resumen en una frase dicha por el mismo Mussolini: “dentro del Estado todo, fuera de él, nada”.

Por otro lado, el liberalismo o la derecha, lucha contra el tamaño inmenso del Estado, cuando no, desaparecerlo; de igual forma, aboga por las libertades individuales, sin que el estado legisle o intervenga en ellas. Así mismo, aboga por el libre mercado, con poca o nada intervención del estado.

Ahora bien, si comparamos las premisas fascistas y liberales, podremos ver que, el fascismo guarda una similitud tremenda con el sistema socialista y así lo afirman las experiencias históricas, ya que en China, Cuba, Venezuela, Vietnam, Unión Soviética y Nicaragua. Sus gobernantes son delirantes tiranos que pregonan el lema de Luis XVI “el estado soy yo”, controlan todos los aspectos de la vida, censuran, persiguen y eliminan toda acción u oposición al estado.

No solo eso, sino que también los socialistas al igual que los fascistas, le declaran la guerra al libre mercado y a la empresa privada, en consecuencia,expropian y estatizan todas las empresas. Esto sin mencionar que ambos, socialismo y fascismo, parten del enfoque netamente colectivista, violando el individualismo.

Ambos modelos (socialismo-fascismo) tuvieron el mismo resultado, hambre, opresión, quiebre económico y falta de libertades, por lo que cabe preguntarse ¿Quiénes son realmente los fascistas? ¿Los que abogamos porque el Estado no intervenga o viole las libertades individuales, los que creemos en el libre mercado y apoyamos a los individuos y sus proyectos de vida o los que apoyan a un Estado supremo que controle todo, que legisle y controle las libertades individuales y vaya en contra del libre mercado?

Es por ello que, cuando se nos acusa a los liberales de fascistas, lo único que queda preguntarles es ¿Fascista yo?.

Por Aldo de Vivo
Escritor Invitado
Politólogo y activista  
Twitter: @AldoDeVivo

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